Averroes, “el comentador” (1126-1198)

Averroes o Abū l-Walīd Muhammad ibn Ahmad ibn Muhammad ibn Rushd por su nombre árabe completo, nació en Córdoba, Andalucía, en el año 1126 y murió en Marrakech en el año de 1198 a la edad de 72 años.

Para Averroes la filosofía de Aristóteles era la filosofía misma. Según este pensador, Avicena y Al Farabi, otros dos grandes filósofos árabes, habían trastornado la filosofía aristotélica mezclándola con doctrinas religiosas. A su vez se enfrentó con Al Gazali, y filósofo místico de origen persa, que despreciaba a la filosofía como enemiga de la religión, algo que luego se daría también en el cristianismo y que terminaría con la separación indeclinable de la fe y la razón, teniendo como resultado el surgimiento de la filosofía moderna.

Los hombres, según Averroes, se pueden dividir en tres grupos o clases, a saber, la gran mayoría del pueblo que vive por la imaginación más que por la razón; los teólogos, que tienen las mismas creencias que la mayoría del pueblo; y finalmente, un pequeño grupo de filósofos que perciben lo central de la verdad que contienen las fantasías de los hombres de fe y las probabilidades dialécticas de los teólogos. Por lo tanto, los dos primeros grupos, es decir, el pueblo y los teólogos, contienen verdades filosóficas adaptadas a las mentes inferiores incapaces de percibir la verdad por sus propios medios.

Con respecto a la demostración de la existencia de Dios, Averroes va a decir, al igual que Aristóteles, que es posible probarla por medio del análisis del movimiento. El razonamiento sería el siguiente. Hay seres que se mueven y pasan de la potencia al acto. Luego, lo que se mueve es movido por otro que está en acto. Ahora bien, es imposible pensar una infinidad de motores, de allí que tenga que existir una causa primera del movimiento, un primer motor que...
...sea inmóvil y acto puro, es decir, que mueva, pero que no sea movido por nada. Averroes va a decir que hay 38 movimientos primarios del universo, por lo cual hay 38 inteligencias o actos puros de las cuales la primera de ellas es el Primer motor que mueve a las demás.

Las inteligencias, por ser actos puros, son eternas e increadas ya que la noción de creación no es propia de la filosofía sino de la religión. Una vez desentendido Averroes del concepto de creación, debe negar la distinción real entre esencia y existencia, en otras palabras, entre aquello que es y aquello que hace que esa cosa sea eso y no otra. Al igual que para Aristóteles, para Averroes el ser es la substancia. Y con respecto a los universales, dirá que solo existen en el intelecto. El ser es un accidente y solo existe en la sustancia. El ser es esencia.

El alma es la forma substancial del cuerpo humano incapaz de sobrevivirle al cuerpo luego de la muerte. Su facultad máxima es el intelecto pasivo o la imaginación. Por medio de este, el intelecto pasivo, puede unirse al Intelecto Agente, Dios, que es el mismo para todos los hombres, por medio del conocimiento y el amor. En esto consiste la dignidad del hombre para Averroes.

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